De vuelta a la tranquilidad, de vuelta al calorcito abrasador del Sol de verano; que aun no acaba de lucir brillante, de vuelta a los días eteeernos y las noches cortas y asfixiantes; en que lo último que apetece es dormirse en la cama invernal y en las que te pararías a dormir en una balsa de ese agua del mar, todavía salada y fresca.

Tranquila y de buen humor, sarpullidos incluidos, que flojita soy... El Sol, mi Sol siempre me la juega igual. La nena no, ella capta cada rayo y lo bebe; y tendré que empezar a decirte nena, como él; que pares ya y nos dejes un poquito a los demás...

Y con el último examen a 3 días vista, y sin creémelo aun, con la cabeza más en largos atardeceres en la playa; de esos en los que tarda en esconderse el Sol, y en los que aun puede disfrutarse del ruido de la marea subiendo y el olorcito salado de la piel; sin que nos invadan la vista miles y miles de sombrillas y cremas solares de mil olores.

Y de las risas, y de unos cuantos "pitis" que nos saben a gloria después de paquetes y paquetes quemados, absorvidos por las ansias de un examen tras otros. Y laaargos cafés (con hielo ;P), y poder elegir tomar algo más frío sin que nos entre ese escalofrío de cuando se nos congelan las ideas, ni que se nos deshaga aun, antes de poder llevárnoslo a la boca.

Y con esa extraña sensación, que precede cuando sabes que vas a añorar tanto a alguien; ell, que parla en català tancat de poble, y que se ha convertido en indispensable en mi día a día, en sus mil historias y sus mil llamadas telefónicas subiditas de tono, que me explica desde el otro lado del auricular; pese a que yo puedo sentir como le tiembla la voz entre el nosequé que le entra y la vergüenza que le da contar nada, qué haré yo estos meses ...

Y las FIESTAS, fiestas con mayúsculas que nos esperan; conciertos con mareas, viajes al paraíso de donde quiera que sea, muchos zepp niñas, y muchas noches de esas de hablar y hablar sin parar.

Ay! y mis niños que vuelven este año, tal vez más pequeñitos y revoltosos que nunca...

¿Y qué te puedo decir, niño? Tal vez me siente bien no verte, tal vez sea el momento de hablar y como dice la niña sea que quiero algo más de lo que nunca quisiste darme, o tal vez no nos haga falta y sigamos haciendo ver que no pasa nada, que nunca pasó y nos sigamos regalando besos secretos, ... Sólo te digo que prefiero no pensar mucho y que desde luego por esta vez, haremos la mía, o no la haremos.

Como dice la nena; o tú, o yo, pero YA.